El motivo de tus sueños

Mientras dormimos, las experiencias que hemos vivido durante el día y que van a ser candidatas a recuerdos son entrevistadas y sometidas a un proceso de selección llevado a cabo en el hipocampo. Cuando nos metemos en la cama, los sentidos dejan de captar estímulos y la consciencia desaparece. En ese momento, la percepción de la realidad se genera a partir de la memoria y los posibles nuevos recuerdos.

Vayamos por orden. En primer lugar, debemos definir en qué consisten los sueños. Todos hemos tenido sueños que varían desde una situación totalmente realista que hace que nos despertemos angustiados por la noche pensando que nos estamos cayendo por un barranco, hasta sueños en los que la mismísima reina de Gran Bretaña nos invita a un té con pastas en el palacio de Buckingham. El motivo es que los sueños no siguen un patrón definido, lo que hace que estos sean, en ocasiones, una representación de nuestras vidas sin las distracciones del mundo exterior y, a veces, también creaciones completamente nuevas creadas mediante procesos de auto-organización en la mente soñadora sin seguir ninguna directriz.

El sueño requiere un primer paso fundamental para poder dar rienda suelta a su creatividad, y este consiste en la detención de nuestra capacidad para ser conscientes. Pero, un momento, ¿en qué consiste la consciencia?

La consciencia es la imagen visual y auditiva interna, los sentimientos, los pensamientos que determinan quienes somos. Pero durante el sueño, esta se modifica de tal manera que no existe un único “yo”, si no que podemos ser un “yo” actor/actriz de Hollywood, o un “yo” astronauta. Esta modificación de la expresión de los contenidos mentales mientras dormimos se debe a los cambios en la activación química que el cerebro experimenta en el momento de irse a la cama.

A medida que nos vamos quedando dormidos, la energía metabólica del cerebro y el flujo sanguíneo asociado con la actividad neuronal comienzan a decrecer. Del mismo modo, mientras se van sucediendo las etapas hasta llegar al sueño profundo (fase REM), la conexión entre regiones adyacentes del cerebro también va disminuyendo. Pero lo verdaderamente importante es el paso de esta fase REM hacia las siguientes etapas previas al despertar. En ellas se produce una activación y desactivación selectiva, que afecta al sueño y al contenido de este mediante cambios en nuestra memoria a corto plazo y en la manera en la que integramos la información en las etapas anteriores. Esto causa un desorden que puede llevar a que aparezca en tu sueño una imagen combinada de eventos que tuvieron lugar en diferentes momentos. Para comprender un poco mejor el paso por las diferentes etapas del sueño lo explicaremos con una gráfica.

También te sonará la aparición de cosas totalmente incongruentes en tu sueño, como ver a tu perro hablando. Bien, pues esto sucede debido a una desactivación de la corteza dorsolateral prefrontal, que deja de regular el contenido de nuestra consciencia, permitiendo la aparición de sensaciones inconscientes y pensamientos sin ningún tipo de coherencia.

Finalmente, el cambio por excelencia que sucede en el cerebro en estas situaciones está determinado por el cambio en la liberación de neurotransmisores. El resultado es la inactivación del sistema adrenérgico, combinada con el mantenimiento en activo del sistema colinérgico (el que se encarga de la puesta a punto de la percepción), lo que contribuye a la aparición de alucinaciones, así como a reducir la habilidad de reconocer la inverosimilitud durante el sueño (por ejemplo, ver a un perro hablando por teléfono, pero no poder leer lo que pone en un cartel publicitario).

Así que, ahora ya no debes asustarte al despertarte angustiado pensando que tu gato te va a pegar con una escoba, puesto que ya sabes que solamente es el resultado de tus neuronas “encendiéndose y apagándose”.

URL imagen mujer durmiendo

URL imagen sueño

Gráfica extraída de: https://encuentracolchon.com/wp-content/uploads/2020/04/fases-del-suen%CC%83o-min_.png

URL corteza dorsolateral prefrontal